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domingo, 8 de octubre de 2017

Cómo redactar una crónica periodística

Hay un consenso en la forma de escribir la crónica periodística, es decir, en la estructura cronológica de narración. La estructura básica sería entonces:

a) Introducción o anulación del tema;

b) Argumentación o desarrollo de la historia;

c)  Conclusión o emisión del juicio sobre el tema.

Desde un punto de vista formal, el estilo de la crónica debe ser claro, sencillo, conciso; revelador de un contenido objetivo, de un mensaje que comunica a alguien.  

La crónica de firma reconocida es libre de escribir como quiera, su estilo personal es indiscutible.

Siempre que su trabajo no soslaye las elementales normas informativas propias del periodismo como medio de comunicación.

Por ejemplo estipula tres partes básicas en la conformación de una crónica:

a). La entrada (para llamar la atención del lector);

b) El cuerpo (narra lo sucedido, en forma narrativa directa o dramatizada con diálogos; la imaginación no debe tergiversar los hechos);

c) La culminación (el objetivo hacia el que el redactor ha estado llevando a sus lectores).

Johnson y Harris dicen al respecto:

“la entrada somatizada, con el cuerpo por orden cronológico, se usa frecuentemente. Hay todavía otra forma”. Se llama la noticia del clímax inesperado. El propósito de la técnica del climax inesperado es retener la atención del lector para un final de relato cronológico Henry, clímax con impacto. No se aplican las reglas referentes al orden cronológico o de las cinco preguntas. Al contrario, el relato va constituyéndose a medida que se desarrolla. Pero el comienzo debe tener   un interés “con suspenso, para atraer lectores”.

La fórmula de Carl Warren se basa en cinco puntos:

1. Presentación o caracterización,
2. Acción creciente,
3. Crisis,
4. Acción declinante, y
5. Desenlace.

El autor agrega: “El impacto en la última línea. Un redactor de reportaje de tipo dramático tiene la misma obligación que el dramaturgo: culminar con su impacto. Esto significa que debe conocer, y escribir mentalmente, las últimas líneas antes de empezar, de modo que del desarrollo de su escrito  constituya una preparación del desenlace dramático. El aspecto más difícil de la dramatización consiste en desarrollar cuidadosamente la intriga, despertando la curiosidad sin satisfacerla. Mantener el secreto hasta la revelación final”. Advierte que el título nunca revelará el final, pues más bien deberá participar” en la conspiración para preparar el climax”.

Clasificación de la crónica periodística

Para Jonson y Harris, la crónica periodística puede clasificarse en: descriptivas, narrativas o expositivas, con la advertencia de que: “no puede ser imaginaria. Los incidentes hechos y personajes aludidos son reales y deben existir, no crearse”.

Martín Vivaldi nos dice que “La crónica (por su enfoque puede ser impresionista o expresionista. “Queremos decir que el cronista puede contentarse con una impresión más o menos fotográfica de lo que cuenta (...) o también puede darnos una versión mentalmente reelaborada de los hechos”

El profesor Beltrán clasifica dos grupos importantes de crónica:

1.- En cuanto a la naturaleza del asunto:

a) Crónica general (...) temas de cualquier naturaleza, divulgados bajo un epígrafe general, forma gráfica o ubicación en página permanente;

b) Crónica local (“urbana” o “de la ciudad”)... La vida cotidiana de la ciudad;

c) Crónica especializada (llamada a veces “de comentario” integrando la respectiva página o sección, con presentación gráfica del texto, y distinta de las demás materias que son publicadas allí, el autor focaliza los asuntos referentes a (especialidades): política, deportes economía, etc.

2.- En cuanto al trato dado al asunto:

a) Analítica, en que predomina la dialéctica: los hechos son expuestos con brevedad y estudiados luego con objetividad (parece pequeño ensayo científico);

b) Sentimental, en que predomina la apelación a la sensibilidad del lector y en donde los hechos son explotados en aquellos aspectos pintorescos, épicos, líricos, capaces de emocionar e influir en la acción, mediante un impulso casi inconsciente (...) lenguaje vivo, calificativos, sustantivos concretos, gerundios, el ritmo es ágil ... no tiene profundidad dialéctica.

c) Satírica humorística, en que el objetivo es criticar, ridiculizado o tratando con ironía los hechos, acciones. Personajes o pronunciamientos comentados, con la finalidad de advertir o divertir al lector.

La crónica de interés humano


A partir del énfasis en informar sobre las personas, la escuela norteamericana desarrolló el interés en las noticias, globalmente, para producir como su mejor resultado la llamada “Crónica de Interés Humano”.

Este interés humano es una de las características principales del periodismo del país del Norte y es justamente la que probablemente marca la diferencia con el periodismo que se cultiva en América Latina.

Desde el cambio a la gran industria del periodismo Norteamericano inicio una verdadera carrera de búsqueda de personalidades capaces de interesar a su publico masivo, se ha intentado de una serie de teorías explicativas de este fenómeno que van desde la citada premisa simplista de “ las personas se interesan por las personas” hasta problemáticas psicologías “ identificación” propias de las masas norteamericanas,  la nota de interés humano tiene como característica cierta superficialidad,

La crónica de interés humano es aquella información que tiene por objetivo movilizar emociones en el lector apelando a su sensibilidad. Pero no contempla el tipo de crónica de verdadero “interés humano” o sea la movilización de la sensibilidad hacia situaciones de tipo social (miseria, injusticia, etc.) sino que se detiene en el hallazgo de hechos triviales (La niña perdida, el perrito ahogado, la vaca ciega, etc. Esta técnica, sin embargo, puede ser rescatada de tipo social y que no podrían ser suficientemente explicitadas si se plantearan como notas informativas comunes o entrevistas.

Harrington definió perfectamente este tipo de información: “La crónica de interés humano hace uso franco de emociones elementales o instintos tales como curiosidad, amor, miedo, sorpresa, humor, compasión, tristeza, lucha por la vida, riqueza y felicidad, todos los cuales hallan respuesta inmediata en toda la gente”. Planteó asimismo, que la nota de interés humano puede resaltar:

a) Lo dramático y heroico

b) Conductas inusuales de animales y

c) Sentimientos de simpatía.

Johson por su parte dice que la historia de interés humano tiene como objetivo entretener y dar a conocer, remarcar la naturaleza y sus hábitos vida de la gente. Este tipo clásico de artículo agrega, no tiene elemento específico de actualidad inmediata.  Rara vez contiene valores noticiosos en el sentido de la nota informativa más bien surte, alimenta la curiosidad de la gente acerca de otra gente, animales, rareza, cosas y lugares inusuales. La clave del interés humano no es la significación la reacción emocional ya sea risa o llanto, simpatía o cólera.

Citaremos finalmente a Mandel nuevamente:

“La nota periodística de interés humano parece ser un fenómeno típico de los Estados Unidos; en el fondo, no es más que la adición de interés humano y colorido, a las notas periodísticas objetivas. Sin embargo, a diferencia de estas últimas, la nota de interés humano no tiene más límite que la inventiva y la facultad creadora del redactor”.

La crónica de interés social


Por contraste a la crónica de interés humano típica de los Estados Unidos, en otros países, especialmente en América Latina, ha surgido lo que llamaremos arbitrariamente “Crónica de interés social”, para diferenciarla de la anterior.

Este tipo de crónica es la que enfatiza el relato de situaciones en la que resalta cuestiones eminentemente sociales y que contienen un elemento de simpatía hacia los actores del drama. Y a la vez, denotan una posición muy bien definida de reclamo, de cambio.

Normalmente descubren aspectos que podrían resultar desagradables para determinados sectores y que prefieren optar por el silenciamiento. Crónica sobre niños mendigos, obreros desocupados, huelguistas de hambre, familiares de presos, escasez de alimentos, etc. y en fin, todo aquello que suponga abrir una herida en el “Sistema” para mostrar el interior, provoca rechazo en los grandes diarios llamados “aspectos desagradables” de la vida. Estos aspectos forman parte, sin embargo, de la realidad concreta, objetiva, de cualquier país.

La finalidad de la crónica de interés social es la denuncia de los problemas de la sociedad; la miseria, niños en la calle, la violencia etc.  y con esto pretende sensibilizar a las instituciones, autoridades y a la sociedad en general sobre estos problemas

En cuanto al contenido, del tema de la crónica, podríamos diferenciar todavía varias clases más, que son muy populares, a saber:

a) Crónica de viajes. Relatos de experiencia de viajes, especialmente en lugares exóticos. Puede ser también de énfasis en las anécdotas de viajeros:

b) Crónica de remembranzas. Relato de recuerdos, fragmentos de “memorias”, de cierto significado histórico;

c) Crónica histórica. Relatos de contextos de antecedentes de  situaciones  de actualidad que requieren de explicación de orígenes, tienen sentido sólo cuando va acompañada de la nota informativa respectiva.

d) Crónica de corresponsal. Relato y comentario de noticias de impacto especial, que sigue inmediatamente después de la nota informativa y a modo de ampliación. Supone gran actualidad.

e) Crónica Política.  Estas sólo se justifican cuando el autor es personaje literario o político, es muy conocido y se puede decir que esta crónica, máxime si se tiene en cuenta su posible y probable influencia en la opinión pública.

Entendiendo a este punto como manifestación de la vida de un pueblo, el cronista no ha de lograr el político, sino ampliar enfoque de su cámara mental a lo que se refiere.

f) Crónica local o urbana. Esta da cuenta de la vida cotidiana de la vida rutinaria de la ciudad.

g) Crónica roja o sensacionalista. Este estilo periodístico que en su trabajo intencionalmente, exagera o desorbita la importancia real de un suceso, bien por la forma expresiva o también por la presentación de las fotografías.

El sensacionalismo cada día más desacreditado, pero continúa con sus adeptos.

La cultura propia de nuestros tiempos exige un tratamiento correcto y exacto de la información.

La fácil objetivación sólo se considera como sensacional a la noticia que realmente lo sea. Y la verdad es que lo sensacional no abunda, y muchas veces es corriente de todos los días haciéndose blanco de las crónicas rojas

Dentro de la gama de géneros que cultivan los corresponsales en el extranjero, esta la crónica de comentario sobre un suceso importante. Probablemente la tarea más importante del corresponsal será la de  enviar oportunamente y rápidamente,  el relato de un  hecho. Mas tarde es seguro que enviará a su oficina central un artículo de comentario sobre aquella noticia y que tendrá características de crónicas.

Estas crónicas de comentario sobre sucesos suelen tener varios tipos de enfoque, fácilmente diferenciales: - Las de tono personal, que sólo se justifican  cuando el autor  es personaje  literario, político, etc, muy conocido; - las de análisis de la agencia, sin identificación del autor : y Las    firmadas por periodistas de la agencia o colaboradores.


La crónica de guerra


La “crónica de guerra” es un tipo especial dentro del amplio género de crónica, es transmitida periódicamente basada en la premisa de que el lector ya conoce el contexto en que se realiza el conflicto armado. No es una crónica que informa a la vez que contextualiza.

El desarrollo de la crónica de guerra va aparejada a la historia misma del periodismo. Y los más célebres corresponsales de guerra   obtuvieron sus mejores éxitos periodísticos no tanto en la celebridad del envío de noticias sino en su capacidad para describir las condiciones, situaciones, etc. De las acciones de guerra, de los combatientes, esperanzas y desalientos, (Juan Gargurevich).

El mayor auge de este tipo de crónica se dio, indudablemente, durante La Segunda Guerra Mundial gracias al desarrollo de las comunicaciones y la formación creciente de públicos masivos, vivamente interesados en las incidencias de la gran confrontación armada involucrada a diferencia de la Primera Guerra – prácticamente todo el planeta, de un modo u otro.

La crónica de viaje   


Dentro de la extensa gama de crónicas, la “Crónica de Viaje” es probablemente la más cultivada desde hace muchos años. Y no solo por periodistas y escritores, sino también por aficionados que estimaron que su viaje había sido lo suficientemente exótico  o interesante  como para registrarlo en letra impresa. Diarios revistas y muchos libros han publicado crónicas viajeras. En América Latina fueron frecuentes los relatos de los viajeros que recorrieron la Unión Soviética o China en los años 50 como muestra de, repetimos, exotismo ante lo “desconocido” de entonces. También naturalmente se han publicado crónicas sobre países orientales, regiones remotas o acaso inaccesibles.

La crónica de remembranza o del recuerdo


Los diarios publican frecuentemente Crónicas de Remembranza, de acuerdo, añoranza , en que el actor rememora tiempos pasados buenos o malos de cualquier tema. Para encajar en ese tipo   de  crónica, tienen que tratarse de temas asuntos vividos por el autor.

En América Latina se tiene mucha afición a la crónica de la remembranzas y se han publicado incontables: quienes tiene capacidad de convertir  sucesos en anécdotas tienen siempre algo que contar. Y lo escriben. Así, muchos escritores han sido atraídos por el género y por supuesto los periodistas mismos.

Definición de crónica periodistica

Al revisar diferentes libros de periodismo y centrarnos en la crónica, observamos definiciones similares:

Dice Erick Torrico: “La crónica está basada en un criterio cronológico, o sea en el desarrollo sucesivo –e identificable de ese modo en el tiempo de la parte de un hecho o de una serie de acontecimientos que constituye un conjunto cuyo nexo esencial es la causalidad.”

Es el relato pormenorizado secuencial y oportuno de un suceso dinámico de interés colectivo. La crónica narra cómo se produjo un hecho noticioso y recrea el escenario y la atmósfera en que aconteció, no obstante su naturaleza y motivación, la crónica no se rige estrictamente por el desarrollo cronológico del suceso, sino que puede cuando contenga alterar esa estructura lógica mediante un ordenamiento jerárquico de los detalles.

El objetivo de la crónica es hacer vivir al sector la presencia de los acontecimientos, por ello se preocupa de captar lo pintoresco, lo bello, lo peculiar y lo humano. No tiene la concisión de la noticia y da margen a la creación literaria.

Así entonces, con ligeras variantes, los autores norteamericanos comprueban la necesidad de plantear aquel tipo especial de artículo, que escapa a las reglas rígidas de objetividad de la vieja escuela.

Harrington H. F., en Typical Newspapers Stories (1915) escribía: “Una nota informativa es un boceto al carboncillo; una crónica es un retrato terminado, culminado con sombra y color” (13).

Debe advertirse que la escuela norteamericana no marca diferencia clara entre el Reportaje y la crónica y que a principios de siglo, ya con un periodismo muy desarrollado, sus géneros fundamentales eran sólo nota informativa crónica, con su variante de crónica de interés humano, entrevista y algunas variantes que se mencionaran más adelante.

Finalmente, pondremos una definición de crónica:

"es un relato sobre personas. hechos o cosas reales, con fines informativos, redactados preferentemente de modo cronológico y que,  a diferencia de la nota informativa, no exige actualidad inmediata pero sí vigencia periodística".

Raúl Rivadeneira explica:

“La palabra crónica sugiere inmediatamente la expresión ‘crónica’ relación en la que el elemento tiempo o más precisamente la sucesión temporal de un hecho determina la estructura de la noticia. Acontecimientos deportivos, viajes, sucesos políticos y otros, son aptos para la crónica periodística. No se trata de una sujeción rígida, cronométrica en el curso de los acontecimientos, sino de la relación de incidentes relevantes del mismo, dentro de una sucesión ordenada”

Siegfried Mandel, llama a las crónicas “informaciones complementarias” o  “de suplemento”, partiendo seguramente de  la comprobación empírica, objetiva de la existencia de un tipo de artículo que no se ajusta a las definiciones que él mismo plantea. Y a esa forma de artículo, decide entonces definirlo como especialidad del redactor de suplemento.

Dice Mandel:

“Se considera  a menudo que la redacción de suplemento es la más literaria de todas las formas periodísticas, debido a que se requiere las aptitudes que caracterizan a la novela: narración de incertidumbre sostenida; dramatización de los acontecimientos; descripción de los personajes desde el punto de vista de su apariencia, hábitos sicología., motivaciones, diálogos, sentido del humor y comprensión, y la capacidad del narrador para producir una culminación significativa y vigorosa (...) Debido a que la información de suplemento requiere este acicalamiento de  la noticia, el periodista novato debe dominar primero las técnicas de la redacción periodística objetiva antes de probar su suerte con los artículos de suplemento”.

Juan Gargurevich afirma “que la crónica es un relato sobre personas, hechos o cosas reales con fines informativos, redactados perfectamente de modo cronológico y que, a diferencia de la nota informativa, no exige actualidad inmediata pero si vigencia periodística”.

Johnson dice que "las crónicas son sencillamente, aquellas en que el elemento noticioso no es la razón de ser de la misma nota y que en términos generales la crónica intuye información de interés humano”.

Maria J. Sierra coloca a la crónica en los géneros informativos al decir que la crónica es un genero de la literatura periodística eminentemente informativo y por lo tanto, con una colocación lógica dentro del periodismo, por cuanto en toda narración hay siempre una tendencia informativa la, buena crónica hace vivir al lector la presencia de aquellos acontecimientos a los que no asistió y, aunque aparentemente menos importante en sus asuntos que otros géneros, constituye para el publico interesante elemento informativo

Otros autores no dudan en colocar a la crónica entre los géneros de opinión que a continuación son mencionados.

El brasileño Beltrán no duda en colocar a la crónica entre los géneros de opinión. Su planteamiento es que: “La crónica es la forma de expresión del periodista para transmitir al lector su juicio sobre hechos, ideas y estados psicológicos personales o colectivos. (...) Como los demás géneros periodísticos, la crónica está íntimamente unida a la actualidad, por su etimología griega (Kronos: tiempo) y por su tradicional sentido de relato de acontecimientos en orden cronológico”

Martín Vivaldi define a la crónica como “una información interpretativa y valorativa de hechos noticiosos, actuales o actualizados, donde se narra algo al propio tiempo que se juzga loo narrado. Así coloca a la crónica como un género, entre informativo y de opinión “Lo característico de la verdadera crónica, es la valoración del hecho al tiempo que se va narrando. El cronista, al relatar algo, nos da su versión del suceso; pone en su narración un tinte personal”

lunes, 11 de febrero de 2013

10 Consejos para la escritura de una crónica. Por Alberto Salcedo Ramos


“La crónica: el rostro humano de la noticia”

“El periodismo es el oficio más bellos del mundo” (Albert Camus) pues permite retomar la información como posibilidad narrativa.

1.    La crónica desarrolla un aspecto secundario o de color de un acontecimiento que ha sido, antes, objeto de tratamiento noticioso. Ese es su valor agregado.

2.    Es necesaria una narración detallada para reconstruir el escenario en donde sucedieron los hechos.

3.    Se deben narrar acontecimientos de interés general, de acuerdo a la época. Aquí, para la elección del tema, es importante tener en cuenta que este puede ser noticioso, afectar al mayor número de personas o ser actual para que le interese a la gente y cause curiosidad en la opinión pública. Además debe ser un tema en donde el persona experimente conflictos consigo mismo y con su entorno. De acuerdo con lo anterior, se debe lograr que el personaje, gracias a esos conflictos, exprese sus emociones para hacer humanos las cifras y los imples datos. En otras palabras, para darle un rostro humano a la noticia. Finalmente es importante escribir sobre lo que se conoce y nos interesa a nosotros mismos como periodistas pues esto hará apasionante la crónica y nos permitirá creer en el tema y volverlo así interesante.

4.    La crónica es un género no tan estricto, en donde el autor puede tratar los diferentes temas de la manera que mas le parezca conveniente para los objetivos narrativos de la historia.

5.    Las acciones, dentro de la historia, se convierten importantes dependiendo de las necesidades del relato. Lo anterior lo decide el autor.

6.    La crónica es, en cierto modo, subjetiva pues interpreta la realidad en el marco de otras miradas.

7.    Al haber escogido el tema, el paso siguiente es el trabajo de campo en donde la investigación es lo más importante. El periodista debe tener, según Malinowsky, citado por Salcedo en su texto, la “capacidad de sumergirse sin prejuicios en la cultura de los otros con el fin de comprenderla y aprehenderla”.

8.    Al haber recopilado toda la información, se debe seleccionar lo que se va a contar y la forma en que se va a contar, teniendo en cuenta que la crónica es “la vida sin los momentos aburridos” Alfred Hitchcock.

9.    En la escritura no hay que dejar de lado la información importante que recree el contexto e el que sucedieron los hecho, por más aburrida que esta sea.

10. El primer párrafo es muy importante, es en él en donde se debe abordar el tema de manera contundente para así lograr enganchar al lector y llevarlo a que conozca el remate de la historia que sin duda, debe ser definitivo.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS:

·      Salcedo, A. “La crónica: el rostro humano de la noticia” Pasos esenciales del género, desde la selección del tema hasta la escritura final.

·      https://sites.google.com/site/tallerdeperiodismo20121/

sábado, 30 de abril de 2011

¿Qué es una crónica periodística?

"La crónica es, en esencia, una información interpretativa y valorativa de los hechos noticiosos, actuales o actualizados, donde se narra algo al propio tiempo que se juzga lo narrado" (Martín Vivaldi, 1987, p. 123).

La etimología de la palabra propone una idea de la crónica como el relato de los hechos tal como sucedieron por orden cronológico. Esta definición no está mal, es cierta, pero es insuficiente. Sobre todo en periodismo. En la crónica periodística esa sería sólo una de las características.
El primer modo de utilizar la crónica –género exclusivo de las lenguas derivadas del latín—fue para realizar relatos históricos, por su interesante narrativa. Posteriormente fue el modelo casi excluyente a la hora de relatar los viajes de exploración de los navegantes europeos en sus conquistas en el nuevo mundo. Finalmente, el periodismo se apropia de este género para recrear con características propias del oficio un género difícil de definir y de escribir, como es la crónica periodística.

¿Cuál es la diferencia sustancial entre la noticia y la crónica? Si bien es complejo definir la crónica periodística y sus características -- no por falta de elementos sino por su gran riqueza-- , se pueden diferenciar de modo básico en que la noticia es el relato inmediato y despojado de los hechos, cuyo valor radica en estas dos características, de modo prioritario.

En cambio, en la crónica puede mediar un tiempo—reducido-- entre lo ocurrido y la publicación y la riqueza de su corpus radica en la subjetividad que le otorga con su pluma quien la escribe.

La crónica es, en esencia, información. Puede interpretarse como la integración de los demás subgéneros periodísticos en pos del relato de un hecho pasado; pero renovado y pleno de detalles, dado que el periodista lo retoma, lo interpreta, lo interpela y lo recrea bajo la influencia de su mirada.

El periodismo se apropia de este género para permitirle al periodista competir con la noticia en el protagonismo, y aportar un estilo personal que embellezca la escritura al riesgo de fusionar la redacción periodística con un texto literario.

Si en la redacción de una noticia el periodista debe escatimar cualquier rasgo de subjetividad y atenerse de modo casi excluyente a la ausencia de un toque personal, por el contrario en la crónica es el periodista quien con su pluma decide el recorte que realizará en la noticia que cuenta, los detalles que elige para relatarla y, en definitiva, el sello que le imponga.

Debido a que los medios audiovisuales son más rápidos en la transmisión de información que los editados en papel, la crónica periodística impresa se centra más en dar respuesta al porqué y al cómo sobrevino el hecho seleccionado que ha ofrecer novedades sobre lo ocurrido, ya que esta última necesidad ya está satisfecha por otros canales.

La interpretación de un hecho es lo que da sentido a la crónica. Allí el periodista se involucra, recorta y selecciona impresiones y le permite al lector sumergirse en el hecho que se relata y compartir, de algún modo, impresiones.

A diferencia de la noticia, en la que poco cuenta la toma de posición del lector, en la crónica es imprescindible una complicidad entre quien escribe y éste.

Si en literatura es necesaria la existencia de un pacto ficcional, en periodismo, para que la crónica exista como tal, debe existir una suerte de relación de confianza entre el periodista y el lector.

Quien firma no sólo informa quién realizó la crónica, establece una relación de credibilidad en la que se ve obligado a dar consistencia y coherencia a los materiales narrativos. El lector confía en que revele y manifieste el sentido de los hechos, porque gracias a su experiencia personal, literaria, histórica, periodística. El lector considera que quien firma es la persona pertinente para cumplir con éxito la función de comunicar.

En pos de esta relación de confianza, el cronista siempre firma sus escritos, como modo de compromiso y vínculo con el lector.

El autor de la crónica deberá transformarse, entonces, en un artesano de la noticia, que elegirá los hechos que considere relevantes, los testimonios –en caso de que los incluya—y los detalles de color que le permitan al lector sumergirse en la crónica informándose sin aburrirse y a la vez sintiéndose parte del relato.

No existe una única manera de escribir una crónica. Dado que depende del estilo del escritor, es posible encontrar tantas posibles maneras de relato como cronistas existan. Lo seguro es que:
Se organizará acorde con el transcurso de los hechos.

Será un relato informativo.

Estará marcada por la subjetividad.

Tendrá una impronta literaria.

Estará firmada

A continuación, les presentamos un texto de Gabriel García Márquez. En un encuentro de escritores, el gabo descolló con esta narración para ejemplificar la diferencia entre lo que contaba y cómo quedaría escrito.

"Imagínese usted un pueblo muy pequeño donde hay una señora vieja que tiene dos hijos, uno de 17 y una hija de 14. Está sirviéndoles el desayuno y tiene una expresión de preocupación. Los hijos le preguntan qué le pasa y ella les responde:

-No sé, pero he amanecido con el presentimiento de que algo muy grave va a sucederle a este pueblo.

Ellos se ríen de la madre. Dicen que esos son presentimientos de vieja, cosas que pasan. El hijo se va a jugar al billar, y en el momento en que va a tirar una carambola sencillísima, el otro jugador le dice:

-Te apuesto un peso a que no la haces.

Todos se ríen. Él se ríe. Tira la carambola y no la hace. Paga su peso y todos le preguntan qué pasó, si era una carambola sencilla. Contesta:

-Es cierto, pero me ha quedado la preocupación de una cosa que me dijo mi madre esta mañana sobre algo grave que va a suceder a este pueblo.

Todos se ríen de él, y el que se ha ganado su peso regresa a su casa, donde está con su mamá o una nieta o en fin, cualquier pariente. Feliz con su peso, dice:

-Le gané este peso a Dámaso en la forma más sencilla porque es un tonto.

-¿Y por qué es un tonto?

-Hombre, porque no pudo hacer una carambola sencillísima estorbado con la idea de que su mamá amaneció hoy con la idea de que algo muy grave va a suceder en este pueblo. Entonces le dice su madre:-No te burles de los presentimientos de los viejos porque a veces salen.

La pariente lo oye y va a comprar carne. Ella le dice al carnicero:

-Véndame una libra de carne -y en el momento que se la están cortando, agrega-: Mejor véndame dos, porque andan diciendo que algo grave va a pasar y lo mejor es estar preparado.

El carnicero despacha su carne y cuando llega otra señora a comprar una libra de carne, le dice:

-Lleve dos porque hasta aquí llega la gente diciendo que algo muy grave va a pasar, y se están preparando y comprando cosas.

Entonces la vieja responde:

-Tengo varios hijos, mire, mejor deme cuatro libras.

Se lleva las cuatro libras; y para no hacer largo el cuento, diré que el carnicero en media hora agota la carne, mata otra vaca, se vende toda y se va esparciendo el rumor. Llega el momento en que todo el mundo, en el pueblo, está esperando que pase algo. Se paralizan las actividades y de pronto, a las dos de la tarde, hace calor como siempre. Alguien dice:

-¿Se ha dado cuenta del calor que está haciendo?

-¡Pero si en este pueblo siempre ha hecho calor! (Tanto calor que es pueblo donde los músicos tenían instrumentos remendados con brea y tocaban siempre a la sombra porque si tocaban al sol se les caían a pedazos.)

-Sin embargo -dice uno-, a esta hora nunca ha hecho tanto calor.

-Pero a las dos de la tarde es cuando hay más calor.

-Sí, pero no tanto calor como ahora.

Al pueblo desierto, a la plaza desierta, baja de pronto un pajarito y se corre la voz:

-Hay un pajarito en la plaza.

Y viene todo el mundo, espantado, a ver el pajarito.

-Pero señores, siempre ha habido pajaritos que bajan.

-Sí, pero nunca a esta hora.

Llega un momento de tal tensión para los habitantes del pueblo, que todos están desesperados por irse y no tienen el valor de hacerlo.

 -Yo sí soy muy macho -grita uno-. Yo me voy.

Agarra sus muebles, sus hijos, sus animales, los mete en una carreta y atraviesa la calle central donde está el pobre pueblo viéndolo. Hasta el momento en que dicen:
-Si éste se atreve, pues nosotros también nos vamos.

Y empiezan a desmantelar literalmente el pueblo. Se llevan las cosas, los animales, todo.

Y uno de los últimos que abandona el pueblo, dice:

-Que no venga la desgracia a caer sobre lo que queda de nuestra casa -y entonces la incendia y otros incendian también sus casas.

Huyen en un tremendo y verdadero pánico, como en un éxodo de guerra, y en medio de ellos va la señora que tuvo el presagio, clamando:

-Yo dije que algo muy grave iba a pasar, y me dijeron que estaba loca".

lunes, 28 de septiembre de 2009

Ejemplo corto de crónica periodística

BUITRES, 17 AÑOS

Y el día esperado llegó. Desde febrero se esperaba ansiosamente la llegada del sábado 1 de abril. Desde las 18.00 ya había cola en la puerta del velódromo municipal. Revendedores que querían comprar entradas, pegotines a voluntad, mochilas, remeras, pañuelos y banderas buscaban entrar junto con la gente al lugar.

De a poco la noche iba cayendo y la impaciencia se sentía. Cuando finalmente abrieron las puertas, todo el mundo entró corriendo para ocupar un lugar cercano al escenario. No importaba otra espera más. Barras de amigos, gente sola y familias aguardaban que el espectáculo de Buitres reflejara los 17 años de vida, junto con los previos de Estómagos.

Unos minutos antes de las 21.00 arrancó el espectáculo. Y salvo por un intervalo de 10 minutos no se detuvo, con alternancia de temas de todos los ritmos.

Literalmente la gente deliró y disfrutó. Las 3 pantallas gigantes del escenario y las 2 de los costados ayudaron a que un velódromo inundado de gente pudiera ver todo el show sin perderse nada.

Para cerrar la primera parte Trotsky Vengaran hizo su homenaje a Buitres,y Estómago con Lucas Terry, El deseo, Canción de Navidad y Torturador. Su comienzo a cargo de Hugo "Llamarada" Díaz, en tono humorístico, dio paso a que la banda hiciera suyos por una vez esas canciones.

Lo más emotivo fue el final: mientras la gente coreaba "¡toca Buitres y si muero hoy el cielo puede esperar!", se apagaron las luces y cuando volvieron rostros reconocidos de la música nacional, estaban junto a los protagonistas: Sebastián Teysera, de la Vela Puerca, el chirola de Hereford y todos los Trotsky.

jueves, 2 de julio de 2009

Ejemplo de crónica: Michael Jackson en Zaragoza


El tema por estos días es Michael Jackson. Navegando, en los archivos de El País, encontramos ésta crónica sobre su llegada a Zaragoza en 1996. El lead no es muy llamativo; pero el último párrafo se presta muy bien a un ejemplo de remate, pues hace énfasis en algo muy singular (la canción de la Macarena). Noten también cómo se maneja la interpretación, que es lo más difícil de hacer, especialmente en la crónica.


Michael Jackson alborota Zaragoza

J. TORRONTEGUI, - Zaragoza


EL PAÍS - Última - 24-09-1996


La "Divinidad en movimiento", como reza una de las pancartas que le recibió en el aeropuerto de Zaragoza y pende de una valla junto a su hotel, está desde las 16.48 en tierra española, en suelo aragonés, para participar esta noche en el único recital que dará en territorio de la UE durante su actual gira mundial. La dos veces milenaria ciudad de Zaragoza está acostumbrada a ver pasear por sus calles a personajes de re nombre, pero ayer volvió a conmocionarse cuando el ídolo de los adolescentes pisó la alfombra roja desplegada en la parte civil de lo que fue uno de los reductos yanquis en España. Precisamente varios pilotos norteamericanos no quisieron perderse la llegada del Party One, nombre con el que está bautizado el Boeing 707 del cantante. En el fuselaje, también figuran las palabras Kingdom Entertainement (reino de la diversión).


Medio millar de adolescentes se agolparon junto a las verjas. Más privilegiadas fueron las autoridades locales, que sí estrecharon el guante blanco de Jackson. Guiados en todo momento por Pino Sagliocco, el productor del concierto, un teniente de alcalde, dos concejales, varios responsables de área y hasta la secretaria de la alcaldesa Luisa Fernanda Rudi aguantaron estoicos los vaivenes del horario de llegada. Entre los más satisfechos, Juan Bolea, concejal de Cultura de Zaragoza, artífice de la hazaña de que Jackson cante y baile hoy en el estadio de la Romareda. Eso sí, la hazaña ha costado 200 millones, aunque se pagarán a plazos. Contra lo que parece rutina en Michael Jackson, que no se distingue precisamente por su cordialidad, esta vez saludó en varias ocasiones a sus admiradores y hasta envió besos a la veintena de periodistas del lugar. Siempre bajo una sombrilla blanca, el cantante paseó sin máscara y ordenó abrir las verjas para saludar de más cerca a sus admiradores.


Las mayores muestras de cariño las dedicó al quinteto de niños que le entregaron dos ramos de orquídeas y lirios al pie de la escalerilla. Los privilegiados Marta y Rocío Bernad portaron los ramos, junto a la hija de un matrimonio de periodistas locales, la de un director general de la Administración regional y un adolescente familiar de Santiago Lanzuela, presidente de Gobierno aragonés.


Besos recibieron también algunas de las niñas que pudieron situarse dentro del perímetro policial instalado junto al hotel Boston, cuartel general del cantante y su grupo. Un padre paralítico acudió junto a su niña, que tuvo el privilegio de ser besada por Jackson en plena explosión de fervor de las más de dos mil personas que se agolparon en el lugar. Otra pequeña que tropezó contra la puerta giratoria del establecimiento consiguió como compensación subir en el mismo ascensor que el cantante hasta la segunda planta, donde está la suite elegida. Las expresiones de afecto no supusieron, sin embargo, problemas de orden público. Algunas muestras de alegría por haber visto de cerca al ídolo llegaron a la histeria y las lloreras, pero nada más.


Cerca del hotel, un reducido grupito de incondicionales estaba apostado desde el sábado para ver de cerca al cantante, recibido ayer al grito de "¡Michael!, ¡Michael!" cuando vieron llegar la caravana escoltada por numerosos agentes policiales. Varios Mercedes, dos de ellos blindados y otros dos matriculados en Inglaterra; dos coches más descapotables; un Jaguar y un Rolls-Royce compusieron la comitiva que recibió tratamiento poco menos que de jefe de Estado. De hecho, la Guardia Urbana cortó las vías transversales a su itinerario y se eliminaron los semáforos, mientras miles de personas apostadas en las calles saludaban a Jackson y su corte. Fotos de primeros planos -milagros de la tecnología protectora- no salieron.


Ya en el hotel, Michael se colgó –literalmente- de uno de los ocho ventanales de su habitación y se sentó en el exterior para saludar a las y los admiradores que, aguardaban en la calle. Más besos a distancia.


La caravana volvió a formarse a media tarde para que el cantante visitara un centro comercial. Compró un compacto, una cadena musical y una grabadora, todo ello por unas 30.000 pesetas. ¿A que no se imaginan cuál era el disco? Sí, era... ¡Macarena! ¿También tú, Michael?